Selva Negra #35 De Dios al Diablo. Clapton & Johnson

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Pecas, el perro de Esperanza Aguirre, es el punk de la derecha. Se nota que escucha a Jiménez Los Santos por las mañanas.

Una noche de humedad en el Delta del Mississippi, en un oscuro cruce de carreteras de la Ruta 61, el Diablo se apareció al mediocre guitarrista de Blues Robert Johnson. Le propuso un pacto: entregarle su alma a cambio de convertirse en el mejor bluesman de la historia. Todos los daban por muerto, pero tras dos años desaparecido regresó a los bares guitarra en mano, convertido en el mejor.

En los ’60 la chavalada británica guarreaba en las paredes el lema “Clapton is God”, encumbrando así al bueno de Eric al apostolado de las seis cuerdas. De alguna extraña manera el espíritu de los negros en tugurios de mala muerte se había unido al de los jóvenes rebeldes, y todo gracias a que Eric Clapton encumbró hasta la obsesión la figura de Robert Johnson. El guitarrista al que todos llamaban Dios siempre ha sentido especial debilidad por versionar el que lo aprendió todo del Diablo.

Hoy nos vamos del Diablo a Dios surfeando las versiones y los originales de Clapton y Johnson. Ya sabes, si una noche en un cruce de carreteras ves a un macho cabrio mirarte fíjamente… párate a hablar con él.

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